El Milan afirma que le han 'quitado' 8 puntos

Ea, ea, ea,

Galliani se cabrea

El que pensara que en este circo en el que se ha convertido el fútbol lo había visto todo, estaba equivocado. Las cosas no andan del todo bien en la parte rossonera de Milan (en el campeonato italiano aún no conocen la victoria en casa), y hay que buscar el culpable de esta situación. No, no es que el Milan tenga una plantilla con una media de edad que sobrepasasa ampliamente los 30, ni que este verano sólo hicieran un fichaje decente (tres si contamos a Emerson y a Ibrahim Ba) que sabían no podría jugar hasta enero. No, de eso nada. La culpa la tienen los árbitros. Pero hay no acaba el asunto, echarle la culpa a otros es bastante común en el fútbol en que vivimos: el Milan, de la mano de Galliani, ha elaborado un dosier donde relata todos los "atracos" que han sufrido y se lo han enviado al señor designador de árbitros Collina y también, cómo no en estos tiempos que corren, nos ofrecen la posibilidad de deleitarnos con él en su página web.

Parece algo más que un chiste ver a Galliani quejarse del trato arbitral. El propio Galliani, de incógnito, colocó a Collina en su puesto, y parece que la jugada no ha obtenido los resultados esperados.

Berlusconi y Galliani ya consiguieron mandar a la Juve al infierno y, a pesar de haber pruebas suficientes, salir indemnes de las investigaciones del año pasado, donde había pruebas que indicaban que el Milan compró asistentes. Tiene que ser una sensación extraña que tu hombre de confianza te dé la espalda, pero es así. Los árbitros se equivocan con el Milan, y claro, como no se esperaba, es molesto. Galliani ya mandó un mensaje sospechoso a Collina tras el partido de Palermo, cuando dijo "No sé en qué está pensado Collina". Se le escapó. Y es que tiene razón, coño, él se esforzó en meter ahí a Collina (bueno, esforzarse, lo que se dice esforzarse, no) y está esperando que le devuelva el favor. Galliani se extraña, yo me extraño, Italia entera se extraña de que los árbitros se equivoquen contra el Milan. Pero Galliani, majo, hazlo menos evidente, disimula un poquito más, que un día de estos te van a pillar, y Berlusconi ya no te va a poder salvar.